La práctica del amor a uno mismo empieza por la mente. Debes aprender a controlar tus pensamientos. Esto requiere que seas muy consciente del presente cuando te comportas de una forma destructiva. Si logras “sorprenderte” haciéndolo, podrás empezar a enfrentar de una manera positiva con el pensamiento que inspira semejante conducta.
Seguramente has descubierto que has dicho frases como: “En realidad no soy tan lista, fue cuestión de suerte el que obtuviera este trabajo”. Es aquí cuando debería sonar una campana de alarma en tu cabeza. Aceptar que te criticas y te comportas de una manera autodestructiva como si te odiaras a ti misma, es una constante en tu vida. Tu estrategia es corregir en voz alta diciendo frases como: “Dije que tuve suerte pero en realidad la suerte no tuvo nada que ver en ese asunto, obtuve ese trabajo porque he estudiado y me he preparado, realmente lo merecía”. Esto representa un pequeño paso hacia la autoestima, respetar lo que eres y tus logros.
Para este cambio necesitas estar consiente para “atraparte en tus miedos y dudas” he irlas corrigiendo.
Con el tiempo se convertirá en un hábito y comenzarás a actuar con respeto y amor a ti misma.Si tu mente actúa a favor tuya en vez de en contra tuya, se vislumbra en el horizonte una serie de fascinantes actividades de autoestima.
Analiza esta breve lista de clase de comportamientos que luego podrás ampliar cuando consigas un sentido de autoestima basada en tu propia valía:
1. Escoge una serie de reacciones que te provoquen enojo o miedo y percibe en tu espacio íntimo como crees que puedes resolverlo si se presenta nuevamente.
2. En vez de dudar inmediatamente de la sinceridad de cualquier gesto afectivo, acéptalo con palabras de agradecimiento, como: “Muchas gracias”, “Aprecio que piense así de mi”.
3. Si hay alguien por quien sientes verdadero amor, díselo de frente: “Te amo”, “Te admiro”, “Me encantas” mientras observas su reacción puedes darte una palmadita en la espalda por haberte atrevido a correr ese riesgo.
4. En un restaurante, consiéntete, pide algo que realmente te guste sin preocuparte por lo que pueda costar. Date un verdadero gusto porque lo mereces. Empieza a elegir las cosas que más te gusten en la vida y prémiate. Destierra toda conducta abnegada en la que te niegues a ti misma a menos que sea absolutamente necesario.
5. Después de un día complicado da un paseo por el parque o sal a caminar para relajar tu cuerpo y mente. Te aseguro que te sentirás cien por ciento mejor.
6. Inscríbete en alguna escuela u organización para tomar parte en alguna actividad que te gusta. Posiblemente has estado postergando hacerlo porque tienes tantas responsabilidades que simplemente no tienes tiempo para ello. Al escoger “amarte a ti misma y seleccionar las tarjetas de la vida que mejor te agraden” aprenderás a tener confianza en ti misma. Descubrirás que eliges hacer lo que deseas porque es lo mejor para ti y no vives con resentimiento.
7. Elimina la envidia reconociéndola como una manera de rebajarte a ti misma. Al compararte con otra persona e imaginarte que eres menos querida que ella, haces que otros sean más importante que tú. Con la práctica y la costumbre de amarte a ti misma, cualquier circunstancia que antes te provocaba celos o envidia funcionara de forma inversa porque TU TIENES EL CONTROL.
8. Tú actividad basada en el amor propio puede incluir nuevas formas de tratar a tu cuerpo, tal como elegir comida nutritiva, ejercicio, salir a disfrutar la naturaleza. Todo lo que desees que te permita sentirte sana. Lo debes de hacer porque eres importante y te vas a tratar como si lo fueras.
9. Sexualmente, conocer tu cuerpo y mente es demostrarte amor a ti misma. La sexualidad sola o compartida debe ser plena y responsable. Recuerda, te mereces lo mejor y estamos trabajando para conocer las virtudes de tu ser.
10. Puedes perder tu puesto o fracasar en algún proyecto, pero eso no quiere decir que tú no valgas, que no tengas méritos. Debes saber que tienes un valor dado ajeno a tus logros. Sin este conocimiento, siempre estarás confundiéndote con tus actividades exteriores.
Estas y muchas acciones similares son típicas de personas que se “aman a sí mismas”Si realmente te amas y respetas enfrenta las siguientes preguntas:
• ¿Puedo aceptarme a mi misma sin protestar?
• ¿Puedo amarme a mi misma todo el tiempo?
• ¿Puedo dar y recibir amor?
Estas tres preguntas debes de trabajarlas todos los días, teniendo como meta enamorarte de la persona más hermosa, más valiosa, más estimulante y atractiva que haya existido: Tú.
Pasa la voz…
Recuerda, Tú eres lo más importante, Tú tienes el control y el Poder está en Ti.
Angy Newman de Laberinto de Luz
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